Carlos Reveco Guitiérrez: Terminal Sur. Por Catalina Gré

 

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Carlos Reveco Guitiérrez: Terminal Sur
Ediciones Overol, 2016.

41 páginas
$5.000

Por Catalina Gré

 

Este es el primer libro de Carlos Reveco Gutiérrez. Son 17 poemas, sin título, de un estilo a la vez claro y misterioso. El primer texto nos propone una declaración de principios: “No quiero ser un cobarde, dije. / Sentí la transpiración en la frente / y me senté a escribir”. Desde este impulso nos movemos y se despliega la narratividad y el imaginario del texto.

El conjunto se articula a través de dos viajes: uno material, el viaje a la casa de los abuelos y otro espiritual, el viaje de la infancia en el pueblo de origen a la experiencia de la muerte. El terminal es un espacio de tránsito entre estos dos destinos y así se nos va contando esta historia de reconciliación.

El lugar de origen se tipifica a través de la naturaleza y el conocimiento de ella, aparecen árboles,hierbas y pájaros específicos, la vendimia, el mate. Aparecen también ciertos lugares típicos: el terminal, la iglesia, el hospital, el cementerio. Se caracteriza también a través de la idea de locolectivo y del catolicismo, el vacío de la religión “el minimalismo oriental dice mucho/ con poco:/donde no hay bastante fe, no hay fe”.  Aparecen ciertos juegos (las carreras de galgos, el ajedrez, la escoba) que también contribuyen a este costumbrismo  y a una idea de misterio, destino y azar que ronda estas páginas.

El personaje se muestra como una voz, una conciencia que deja el lugar donde nació y luego vemos cómo  ese lugar parece dejarlo a él, a través de la partida de sus seres queridos. La idea del hado o destino también está contenida. El uso del futuro como predicción inapelable: “Tomas el bus que te llevará a la casa de tus abuelos (…)”, “(…)Te quedarás una semana”. Es decir, no hay escapatoria posible, sólo enfrentarse aunque no se quiera: “El camino no tiene curvas”.

Viaja y luego sabemos por qué viaja. La abuela está enferma y este agonizar se superpone con el previo agonizar del padre en el hospital. La relación con los ancestros y cómo éstos marcan nuestra identidad es un tema central. La relación dura y distante con el padre se describe a través de sensaciones físicas. No puede llorar pero le duele el cuerpo. “(…) Te duele el cuerpo al saber/ que lo pensaste ignorante. / Él estaba consciente de su soledad / y de tu compañía.”

El estilo de los textos es claro, prístino y a la vez cerrado, encierra un misterio de algo que se escapa y sólo queda la humildad de la propia reflexión que siempre parece austera. Hay algo inherentemente profundo y lírico en la forma en que nos son presentadas las cavilaciones, lo que  da un espesor distintivo a esta escritura. Pienso que es un debut bastante trabajado y que al ahondar en temas complejos como la muerte y la posibilidad de crecer o conmoverse a través las experiencias, logra internar al lector tanto en su opacidad como en su iluminación.