Ernesto González Barnert: Playlist. Entrevista RL y selección de poemas

 

¿Qué libros y discos marcan la escritura de Playlist?

-Durante largo tiempo Playlist llevó este epígrafe de Alex Turner, vocalista de los monos árticos y que me simpatiza mucho más desde que sé que no terminó la enseñanza escolar obligatoria: “Puse mi corazón afligido en una canción pop. No pude cogerle el ritmo a la poesía”. Algo de eso, por cierto me late en este volumen.

 ¿Qué dijo tu editor o primer lector cuando leyó los manuscritos?

-“Quien quiere a su madre no puede ser malo.”

¿Qué lugar ocupa este libro en tu proyecto literario?

-En Coto de caza era un gladiador con sobrepeso, pero igual de aguerrido. Aquí soy un esclavo griego cultivado al servicio de un amo romano abusador.

¿Tiene nombre tu próximo proyecto? ¿De qué tratará?

-Muy pronto presentaré el libro Trabajos de luz sobre el agua con Ajiaco, libro que recibió el Premio Eduardo Anguita el 2009. Y luego viene Cul de sac que espero sea para mí lo que fue Iron Man para Robert Downey Junior.

¿Te sentiste cómodo escribiendo este libro? 

-Algunos días sentí que si decía por ejemplo Karma Karma Chameleon era capaz de mover el vaso de piscola hacia mi mano, telepáticamente, claro.

De qué preocuparse y de qué no…

¿Qué me preocupa? Que no llueva pronto en Santiago y el clavo en la pared que puse ayer en el living para colgar un cuadro que llevaba meses en el piso, de espalda, apoyado en la pared. No me convenció cuando lo colgué así que ahora tengo un clavo en mitad de una pared y un cuadro nuevamente en el piso y de espalda.

El futuro de Chile ¿dónde está?

-No sé si está más cerca de la taxidermia o del embalsamiento. Por otra parte, el mío está en manos de esos nuevos dealers que son los editores independientes.

 

 


Selección de poemas 

 

CON FALDA A LA RODILLA,
blusa de lunares transparente
y zapatitos taco bajo
atraviesa el living
apenas llega del trabajo
a poner en el viejo tocadiscos
por ahora en el suelo
Che M’importa Del Mondo
de Rita Pavone
con lo que de inmediato sonrío,
dejo en no sé qué página el libro
mientras baila como Katherine Spaak
en el film La Noia.

Después corre a la pieza
a ponerse el pijama. Prende justo el noticiario
donde el conductor
anuncia El Tiempo.

Con tres suaves golpecitos
en el cubrecama
pide ahora me ponga a su lado
alumbrados
sólo por avisos comerciales.

Ni siquiera vio la ensalada de zanahoria
quesillo y rúcula
que le tenía servida en un plato
tapado con otro plato.

 

ENVIAMOS AL POLO NORTE
una carta de puño y letra, a dos manos
en la que pedíamos al viejo pascuero
uno de esos aparatos
en que con una mano mecánica
sacas un peluche.

Una maquinita que no necesita monedas
o fichas.
Y que cuando pierdes
suena Las Nieves Del Kilimanjaro
de Pascal Danel,
cuando ganas Une Histoire De Plague
de Béatrice Martin.

 

HOY, MIENTRAS HACÍA LA COLA POR UN HELADO,
una pendeja con audífonos me pidió al llegar mi turno
que la dejara comprar primero.
Tenía la altivez de la niña que se sabe cerca de la adolescencia
y que pronto tendrá la capacidad de herir.
Sí, le dije, ningún problema, y me puse nervioso
cuando se quedó mirando la portada del libro que cargaba:
Picnic sobre el hielo, de Andrei Kurkov.

 

ESCRIBO PARA UNA MUJER QUE CANTA VIENTO DILE A LA LLUVIA EN SU KIOSCO
e interrumpí para comprarle la Rockdelux.
Los que piensan primero en Talk Talk que Bon Jovi
cuando digo It´s My Life.
La que apoya poner Es Mi Vida de Adamo.

 

SI MILES DAVIES HUBIESE DICHO AL PÚBLICO DE MONTREUX
que subiría al escenario a tocar Time After Time de Cyndi Lauper,
con el mismo señorío con que tocaba So What,
muchos le habrían dicho: mal, horror, no.

 

ADORO A LA QUE VA ESCUCHANDO
Voulez-Vous de ABBA
en el auto del papá o pololo
y da de lleno contra un lomo de toro
y no sólo no baja la velocidad
sino que se ríe.

 

INTERGALACTIC DE LOS BEASTIE BOYS
saca lo peor de mí en la pista de baile
y no puedo dejar de avergonzar a la chica de turno
que corta por lo sano y dice que tiene que ir al baño
apenas termina la canción.